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lunes, 27 de noviembre de 2023

Viajar en tren para esquiar, lo más práctico en Suiza



Viajar en tren para esquiar, lo más práctico en Suiza




Cuando conocí a Natalia y me dijo que en Suiza vivía "sin coche" no me lo podía creer.  
¿Cómo podía esquiar tantos días en Suiza sin tener coche? ¿Tenía que depender siempre de amigos que la llevaran de aquí para allá?

Natalia me explicó la fantástica red de trenes que tienen, recorriendo todos los rincones de Suiza y cómo, teniendo pagado el abono anual, casi todos sus desplazamientos los hacía en tren. El trayecto final a algunos pueblos remotos se hace en bus (incluido también en el abono) y a algunos pueblos en altura, en góndola/teleférico (incluidos también en el abono anual).

Yo mismo me he enamorado de los trenes suizos, que aunque son caros, con un descuento a la mitad de precio para todo el año con un bono de 200 eur, sale medianamente rentable.

Me encanta su silencio. Es como un saloncito para ti, con unas vistas de ensueño y con la tranquilidad necesaria para dormir, leer o concentrarte en cualquier tarea. El tren te permite trabajar a la ida de una ruta y descansar a la vuelta (algo que el coche me lo impide).

Al poder empezar en un sitio y termianr en otro, el tren te permite inventarte travesías lineales con esquís, empezando la ruta en un valle y terminando en el siguiente, sin tener que hacer combinación de coches. Siempre hay un tren o un bus en el otro valle al que llegues con tus esquís (o con tus zapatillas en verano) que te devolverá a casa.

A veces terminamos tan tarde la actividad que hemos perdido el tren o bus bueno y tenemos que hacer autostop, una habillidad especial que domina Natalia.

Y cuando uno quiere ir a un valle donde no llega el transporte público, la red "Mobility" de alquiler de coches por horas es otra maravilla. Reservas el coche con la app del móvil y abres el coche con el mismo bluetooth del móvil.

Y al final le doy la razón. Viviendo a 5 minutos de la estación de tren de Arth-Goldau, la vida sin coche para Natalia es mucho más práctica, especialmente si el abono anual es parte del sueldo incluido en muchos de los trabajos en Suiza.

En la foto de arriba a la derecha, imagen del tren de ayer domingo. En el mismo vagón viajaban tanto los suizos que iban a esquiar a las zonas de Andermatt/Realp como los que seguían al sur al Ticino para escalar en boulder al sol. El mismo día, unos pasábamos frío con -10ºC en Realp y otros escalaban al sol en la que yo llamo la Suiza italiana, al sur del túnel del Gotardo. Qué país de contrastes... y todo tan cerca, el sol italiano media hora al sur y la nieve polvo suizo/alemana media hora al norte.

En la última foto, a punto de coger el tren en Bellinzona, en la Suiza italiana, para volver a Arth-Goldau, en la Suiza alemana, este pasado septiembre, tras terminar 4 días corriendo la Vía Alta Idra/Verzasca, en el Ticino.


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