jueves, 29 de mayo de 2025

El síndrome metabólico se revierte con varias medidas. El ejercicio no es suficiente



El síndrome metabólico se revierte con varias medidas. El ejercicio no es suficiente, en mi opinión


La semana pasada, el Dr. Abellán escribió un artículo en su página https://vital.doctorabellan.com/ sobre el Síndrome Metabólico y su manejo óptimo.


En el manejo del mismo referenció al ejercicio físico como el pilar principal para revertir este cuadro pre-diabético de Resistencia a la insulina.
Aunque soy un gran defensor del ejercicio físico para mejorar nuestra salud global, creo que en este caso no es el pilar fundamental sino los hábitos de ingesta y alineación con los ritmos circadianos.

Esta es la respuesta que dejé en su página web:


Hola José,

Tengo pendiente escribirte un comentario el post sobre la prevención del ictus, pero he querido antes escribirte por este post sobre Síndrome Metabólico y cómo revertirlo.

EL ejercicio es siempre bueno, para todo.

Pero si para mejorar tu salud metabólica tienes que hacer ejercicio es porque tu dieta y/o tu estilo de vida son incorrectos. Es algo que ya publicó el cardiólogo Aseem Malhotra junto con el científico Tim Noakes, uno de los mayores expertos en publicaciones sobre deporte: “Es hora de romper con el mito de la inactividad física y la obesidad: No se puede escapar (corriendo) de una mala alimentación”: It is time to bust the myth of physical inactivity and obesity: you cannot outrun a bad diet (PMID: 25904145)

EL Síndrome Metabólico (MS) es un cuadro gobernado por la Resistencia a la Insulina (IR). Es un cuadro de constante hiperinsulinemia, tanto en ayunas, como tras cada ingesta, como ya describió Joseph Kraft con sus curvas de insulina tras 75 g de glucosa en personas con IR (PMID: 29225902), con curvas elevadísimas que tardan más de 5 horas en bajar tras tomar 75g de glucosa.

La mejor forma de bajar la resistencia a la insulina y la dislipidemia que ésta asocia (TG altos y HDL bajo) pasa por una reducción de carbohidratos tipo almidón como harinas (especialmente el pan, la harina del trigo se digiere como el rayo con un índice glucémico casi como la glucosa pura) así como cereales y otros carbohidratos de alta carga glucémica. Una dieta baja en carbohidratos o muy baja, cetogénica, revierte la IR (Effect of low-carbohydrate diets on cardiometabolic risk, insulin resistance, and metabolic síndrome  PMID: 32773574).

Si tenemos un exceso de glucosa, que ha llenado el glucógeno hepático, el glucógeno muscular y que está creando un hígado graso no alcohólico, es la glucosa lo que debemos reducir. Te recomiendo esta reciente entrevistaen el podcast de “STEM-talk”  al Dr. Jason Fung, autor de “El código de la Obesidad” y “El código de la Diabetes”, un médico que ha puesto en remisión a muchos pacientes con DT2 mediante dieta cetogénica (KD) y ayuno intermitente (IF). https://open.spotify.com/episode/4QcwZltANwlnpW0HGz9Ueq?si=14943e5a26134596

La otra herramienta para conseguir bajar los niveles de insulina es no estar constantemente estimulándola, con 5 comidas al día. Ya sabes, “La persistencia crea la resistencia”. Es en los periodos de ayuno cuando tenemos “insulino ausencia” y conseguimos recobrar nuestra sensibilidad a la insulina. De modo que el ayuno intermitente, dejando periodos de 16 horas e insulino ausencia, es una herramienta potentísima. Por ejemplo, como hago yo, 2 comidas al día, con una desayuno generoso en proteína (40 g) y una comida con 60g proteína, sin cenar. Intentado no comer nunca cuando ya es de noche. En mayo de 2018 escribí esta entrada al respecto de esta publicación PMID: 29754952. (https://lameteoqueviene.blogspot.com/2018/05/el-ayuno-intermitente-vespertino-mejora.html)

En esa línea, otra herramienta para mejorar la IR es vivir alineados con los ritmos circadianos de luz y oscuridad. Con una curva fisiológica de cortisol diurno y de melatonina nocturna. La falta de sueño crea un estado de cortisol crónicamente elevado, antagonista de la insulina, creando hiperglucemia e IR.

Lo mismo con el estrés, que mantiene un cortisol crónicamente elevado y que vierte triglicéridos de la periferia (subcutáneo) de forma centrípeta a la grasa visceral. Digamos que el Síndrome Metabólico (MS) es un “Cushing-light”. Por eso, ejercicios de yoga, mindfulness, respiración por la nariz, ejercicios para estimular el nervio vago, buenas relaciones personales, son otra herramienta.

¿Y el ejercicio? Sí, es saludable, pero es sólo un complemento. Nunca será la solución.

Mira, mi hermano tuvo una lesión medular a nivel de C5-C6 en el 2006 con una ola en la orilla de la playa. Llegó a pesar 100 kg (mide 183 cm). Lleva casi 20 años en silla de ruegas. ¿Puede hacer ejercicio? No puede. Pero ahora pesa 70 kg. Sabe que deber reducir harinas y carbohidratos refinados, priorizar la proteína y la verdura y no comer una vez ya sea de noche, debido a la IR que tenemos una vez se hace de noche. Melatonina e Insulina no pueden compartir franja horaria. O, dicho de otro modo, “De grandes y tardías cenas están las sepulturas llenas”. Ha revertido su MS sin hacer ejercicio.

Es la alimentación y el estilo de vida circadiano lo más importante.

En cuanto al tipo de ejercicio para mejorar la sensibilidad a la insulina, el ejercicio de fuerza es el ideal, pues vacía el glucógeno muscular de forma eficaz, especialmente si nos quedamos a sólo una repetición del fallo.

El otro ejercicio ideal es el Interválico (HIIT) con sprints (PMID: 39910758) pues utiliza la vía anaeróbica, ya que esta vía glucolítica es horriblemente ineficiente. Cuando utilizamos el metabolismo aeróbico mitocondrial (como cuando estamos corriendo 1 hora en una cinta o por el parque a ritmo suave) con cada gramo de grasa producimos 9 kcal de energía y con cada gramo de glucosa producimos 4 kcal de energía. Pero si quemamos glucosa utilizando la vía anaeróbica con sprints, entonces 1 g de glucosa sólo producirá 0,5 kcal de energía. De modo que con el HIIT podremos vaciar los depósitos de glucógeno mucho más rápidamente. Esta vía glucolítica también tiene lugar cuando estamos llegando a las últimas repeticiones antes del fallo haciendo ejercicio de fuerza, el ejercicio más cardio protector que existe (siempre que no hagamos Valsalva, claro).

Aquí tienes el testimonio de un adulto que puso su DT2 en remisión con rutinas de sólo 12 min de HIIT:

https://www.diabetes.co.uk/news/2014/mar/pensioner-sends-type-2-diabetes-into-remission-with-12-minute-workouts-91295470.html#:~:text=A%20pensioner%20with%20type%202,day%20after%20his%2060th%20birthday.

En conclusión, para revertir nuestra Resistencia a la Insulina, que gobierna todo el Síndrome Metabólico (MS), en mi opinión, debemos:


1. Hacer una dieta baja o muy baja en carbohidratos

2. Implementar algún tipo de ayuno intermitente (por ejemplo, un 16/8), no cenando de noche

3. Alinearnos con los ritmos circadianos, respetando la oscuridad por las noches y teniendo una buena higiene del sueño

4. Reducir el estrés

5. Hacer ejercicio de fuerza y HIIT

Este conjunto de acciones sería, en mi opinión, la mejor forma de mejorar nuestra salud metabólica, algo de lo que carece el 93% de la población adulta en EE. UU. (PMID: 35798448).

Gracias por leerme, José.


Jorge García-Dihinx Villanova, pediatra Low Carb High Protein, circadian