COVID-19, TRANSMISIÓN POR AEROSOLES (cuando no ventilamos), artículo publicado hoy en El PAÍS

Transmisión por aerosoles, la principal vía de contagio del SARS CoV-2

COVID-19, TRANSMISIÓN POR AEROSOLES (al no ventilar),

Artículo publicado hoy en El PAÍS

Quiero comentar este artículo publicado hoy domingo en EL PAÍS:

https://elpais.com/ciencia/2020-10-24/un-salon-un-bar-y-una-clase-asi-contagia-el-coronavirus-en-el-aire.html

En dicho artículo se recalca la importancia de la transmisión aérea (por aerosoles en suspensión) de la COVID-19 cuando permanecemos en espacios cerrados sin ventilar, especialmente si no llevamos mascarilla, si no ventilamos y si permanecemos allí demasiado tiempo.

Me alegro de que lo parecía "una teoría de sólo 234 científicos locos" que escribieron la carta a la Revista Science, se constate por fin como una realidad.

A partir de ahí, los consejos a la población para evitar el contagio serán los adecuados. Y quizás podamos evitar un nuevo confinamiento.

Hoy en día reconocen tres posibles modos de contagio de la covid:

1. Las gotas que expulsan los contagiados al hablar o toser, de una persona cerca de ti, SÓLO SI TE ACIERTA con la gota en el ojo, en la boca o en la nariz.

2.  Tocar superficies contaminadas y luego llevarte la mano a la boca, el ojo y la nariz. Aunque los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE UU (CDC) indican que este caso es el menos probable y que no se ha descrito ni un solo contagio por esa vía.

3. La infección por aerosoles, cuando se respiran estas partículas infecciosas invisibles que exhala una persona enferma y que se comportan como el humo al salir de su boca. Sin ventilación, quedan en suspensión y se condensan en la sala a medida que pasa el tiempo. Y nosotros, sin saberlo, al respirar, inhalamos dichas partículas, que viajan hasta el fondo de nuestros pulmones.

Estas partículas, al igual que el humo de un fumador, pueden permanecer flotando en el aire de una habitación durante horas y, al igual que el humo de un fumador, se van a acumulando en la habitación cuanto más tiempo esté dentro la persona infectante, cuanto más hable, cuanto más grite y especialmente si lo hace sin mascarilla.

Esta última vía de contagio (por aerosoles en suspensión) es, según los expertos, la responsable del 80% de los contagios de coronavirus.

De ahí la importancia de reunirse afuera (si hace frío, nos abrigamos)

De ahí la importancia de mantener continuamente abiertas la ventanas de las estancias cuando haya gente dentro (si hace frío nos abrigamos).

De ahí la importancia de instalar filtros HEPA portátiles en aquellas estancias cuyas ventanas no se puedan abrir o donde no haya ventanas.

De ahí la importancia de reducir el tiempo que estamos en sitios interiores en los que haya más gente (de ahí el disparate de cerrar parques infantiles. Es precisamente en los parques donde los niños tienen que estar y donde deben recibir las clases y no en sitios cerrados).

De ahí la importancia de de llevar mascarilla siempre que hablemos.

mascarilla quirúrgica, protección sólo parcial

Cuando hablamos emitimos 10 veces más partículas al aire que cuando estamos callados (por eso, al no llevar mascarilla al comer, deberíamos comer siempre en silencio, por Dios) y cuando gritamos o cantamos, expulsamos 50 veces más partículas respiratorias.

La mascarilla actúa de dos formas. La principal es bloquear la salida de esos
aerosoles hacia el exterior, reduciendo enormemente nuestra capacidad de diseminarlos y de contagiar a otros.

Y, por otro lado, si la llevamos bien ajustada por detrás, sirve para evitar que las partículas en suspensión nos entren por los laterales. Algo que no consiguen las mascarillas quirúrgicas, destinadas a que el cirujano no eche sus partículas en el campo quirúrgico, pero que tiene entradas por los laterales por donde nos pueden entrar los aerosoles. En ese caso, se ha visto que algunas mascarillas de tela elásticas cumplen mejor la función de sellado lateral.

pantalla protectora (no útil frente a aerosoles)

Una visera de plástico no ofrece protección a los aerosoles si no se combina con
una mascarilla. Sólo sirve para evitar que te acierten en el ojo si te tosen en la cara (algo muy improbable) pero pueden acumular aire caliente entre tu cara y la visera, haciendo que el aire ascienda hacia arriba y que el aerosol sea más propenso a ser inhalado por ti (flaco favor).

Recordar que los que más infectan son las personas justo el día de antes de presentar síntomas. Es decir, que no tosen, pero que te hablan a la cara, tomando un café, sin llevar mascarilla (porque el café o la cerveza parece que matan al virus y ya podemos hablar sin mascarilla) y que emiten aerosoles (invisibles) que inhalaremos hasta el fondo de nuestros pulmones.

Reuniones familiares y sociales

En estos simples dibujos del artículo del País

se ilustra cómo influye, cuando estamos en sitios cerrados, los diversos factores:

- El número de personas en su interior

- Cuántos hablan sin llevar mascarilla (cualquiera que esté comiendo, por definición, no la lleva puesta... y sigue hablando)

- Cuánto tiempo estamos dentro

- y la posibilidad o no de abrir las ventanas.

Impartiendo clase en el colegio

 

El caso del coro en Washington, el pasado marzo, donde uno de

El paciente 0 que contagió a todos los demás se sentaba en la primera fila

los participantes infectó a 53 de los 61 miembros del coro

Un caso de gran utilidad para entender la dinámica de contagio en interiores a través de aerosoles se vivió durante el ensayo de un coro en el Estado de Washington (EE UU) en marzo.

Al ensayo solo acudieron 61 de los 120 miembros del coro, que trataron de mantener las distancias y la higiene. Sin saberlo, provocaron un escenario de máximo riesgo: sin mascarillas, sin ventilación, cantando y compartiendo espacio por mucho tiempo. Un solo contagiado de covid, el paciente cero, contagió a 53 personas en dos horas y media. Algunos de los infectados estaban a 14 metros a sus espaldas, por lo que solo los aerosoles pueden explicar el contagio. Dos de los enfermos murieron.

Espero que con toda esta información, empecemos a pensar que las partículas en suspensión (como el humo de un fumador, que podemos estar inhalando) son la principal fuente de transmisión del coronavirus.

De manera que:

- Minimicemos el tiempo que permanecemos en estancias cerradas con otras personas y el número de personas.

- Maximicemos las actividades y los encuentros al aire libre (como dar clase en el parque, con abrigo)

- Llevemos mascarilla siempre que vayamos a hablar, especialmente en lugares cerrados (y que comamos en silencio)

- Que mantengamos las ventanas abiertas todo el tiempo cuando haya gente en una estancia (hoy nos han permitido comer en El Molino de Escuer con las ventanas abiertas, a lo cual también han accedido los 6 comensales de la mesa de al lado)

- Que instalemos filtros HEPA portátiles en las estancias en las que no podamos abrir las ventanas

Mucho ánimo, que saldremos de ésta

Jorge García-Dihinx Villanova