Gráfico con el balance de espesores de nieve en imagen de la estación nivológica francesa de Ardiden
Balance de nieve temporada 2008-2009 en los Pirineos
Este año será recordado como uno de los mejores de nieve en nuestro Pirineo aragonés. Durante todo el año los espesores han sido superiores a la media, principalmente de noviembre a abril. De mitad de mayo en adelante la fusión ha sido imparable.
En este año de tanta nieve hay que destacar que el debut fue muy precoz y las nevadas fueron frecuentes y bien repartidas durante la temporada, desde noviembre a abril. Además, las temperaturas de diciembre a febrero fueron frías, favoraciendo una buena conservación del manto nivoso.
Todo empezó cuando escribimos una carta a finales de octubre titulada "Querido Dios" en la que pedíamos nevadas repartidas por toda la Península para el puente del 1 de noviembre. Y así fue. LLegó una entrada de aire frío a finales de octubre y, posteriormente, se metió una "gota fría" en escena, que fue girando sobre el país, repartiendo precipitaciones a su alrededor, de nieve por encima de 1.300 m.
Esta primera gran nevada, (de varios días) entre finales de octubre y primeros de noviembre, permitió la constitución precoz de un manto nivoso significativo, principalmente sobre el Pirineo aragonés occidental. Ya se medían entonces 50 cm de espesor a 1.500m y 1 metro a 2.000m. El Pirineo aragonés oriental y el catalán tuvieron un comienzo más perezoso y no fue hasta el 20 de enero que el manto nivoso se hizo signifitativo.
Durante el invierno, el Pirineo aragonés fue recibiendo generosas nevadas y los espesores en cotas superiores a 1.800m fueron superiores a la media durante todo el invierno. Tuvimos la suerte de recibir 3 grandes nevadas entre enero y marzo que subieron los espesores a valores execpcionales (se ven muy bien en el gráfico de arriba de la estación nivológica del Lago Ardiden, en el Pirineo francés).
Cayeron entre 5o y 70 cm de nieve entre el 25 y el 26 enero (recordad gendarme sepultado por un alud en Bareges antes de la carrera de la Altitoy). Luego cayó un nevadón de entre 1m y 1,5m a primeros de febrero (tuvimos riesgo entre 4 y 5 esos días) y de nuevo otra buena nevada de 70 cm a primeros de marzo (Peña Guara tuvo que suspender su Alta Ruta de Panticosa-Wallon por riesgo 4 de aludes el fin de semana del 7-8 de marzo, recordáis?).
En total, se habían acumulado a finales de invierno 8 metros de nieve en la cota 1.800m. Espesor que equivale un récord desde que se tienen mediciones oficiales (hace 20 años). La media para finales de invierno solía ser de 5 metros.
Otro factor importante es que esta temporada ha tenido un frío constante en invierno. No era un frío exagerado pero sí continuo y su persistencia mantenía el manto sin apenas fusión. Marzo fue un poco más dulce pero realmente no fue hasta la primera quincena de Abril que las temperaturas empezaron a subir y la fusión del manto empezó a producirse.
Este clima frío y constante durante el invierno han permitido condiciones excepcionales para la práctica del esquí de montaña incluso en cotas de media montaña. La innivación en cotas medias e incluso bajas ha sido de récord y, de noviembre a Abril, calificable de invernal. Esta excepcional innivación se ha dado en todas las vertientes del Pirineo, tanto la oeste (la más precoz) como la oriental, a partir de enero (y sobre todo en Abril de Benasque hacia el Este) y se han beneficiado desde noviembre tanto la vertiente francesa como la española.
Por suerte, entre las nevadas, los periodos anticiclónicos han ido sucediéndose y el manto ha ido estabilizándose, siendo un año de no demasiadas víctimas por avalancha en los Pirineos (más importante ha sido el nº de víctimas en los Alpes). Las víctimas por aludes han sido principalmente esquiadores que habían provocado ellos mismos la avalancha (como suele ser lo más habitual).
La última entrada de frío y última nevada importante se dio el 1 de mayo. A partir del 3 de mayo las temperaturas subieron en picado y la fusión empezó de lleno. Además, mayo fue un mes de tormentas y cielos muy nubosos, que impidieron el rehielo durante muchas noches. Al calor de mayo se unieron esas lluvias constantes, que aceleraron la fusión del manto.
Así las cosas, a primeros de junio los espesores volvían a ser acordes a lo normal. Pero eran bien inferiores a los espesores de primeros de junio de 2008, debido a que mayo del 2008 fue el más frío y de más precipitaciones de los que se recuerda (recordar que dichas precipitaciones tan continuas ese mes de mayo llenó de agua los embalses de Cataluña y se tuvo que suspender el trasvase por sequía).
Y ha llegado junio y ha seguido el calor. A día de hoy, sólo hay nieve continua por encima de 2.500-2.600m (1 hora de porteo desde la Renclusa, camino del Aneto).
Por mi parte, deciros que la principal fuente de información a partir de la cual elaboro los boletines de avalanchas son los boletines de Meteo France. Estos boletines, junto con las predicciones meteo que elaboro a partir de los modelos meteorológicos del GFS (wetterzentrale) me permiten estimar el riesgo de aludes para nuestro Pirineo español. Por esto, debéis de dar las gracias a los meteorólogos de Meteo France: Catherine, Pierre, Frec, Gilles y François, por sus puntuales partes de nieve y avalanchas que cada tarde publicaban para sus Hautes Pyrenees.
Y todo esto os cuento. Quiero agradecer todos los comentarios de apoyo sobre el blog de la meteo (que son lo único que hace que el blog se siga emitiendo) y daros la enhorabuena a todos los esquiadores y amantes del Pirineo por esta temporada tan excepcional en nieves.
Nos volvemos a ver en noviembre!!
Jorge García-Dihinx