sábado, 27 de abril de 2019

SILVRETTA TRAVERSE, DIA 6: PIZ BUIN (3.312 m) desde Wiesbadener Hütte, 5 abril

Acercándonos a la pirámide final que forma el desafiante Biz Buin, a la izquierda en la foto
La arista estaba bien bañada en nieve y resultó muy entretenida y alpina. La mejor cima de toda la Silvretta, sin duda


SILVRETTA TRAVERSE, DIA 6
Ascensión al Piz Buin (3.312 m) desde el Wiesbadener Hütte

Desnivel: 1.100m
Horario: 7 horas
Escalada PD (II)
El track: https://es.wikiloc.com/rutas-esqui-de-montana/silvretta-dia-6-piz-buin-desde-el-wiesbadener-hutte-5-abril-2019-35748775

El jueves 4 de abril, 5º día de la Silvretta lo habíamos pasado encerrados en el Refugio de Wiesbadener (2.443 m), viendo nevar afuera. Aprovechamos para leer, descansar, charlar, conocer a gente y disfrutar de las comidas del refugio.

Nos acostamos viendo nevar finamente por la ventana de la habitación, esperando, según daban los modelos, que el viernes el tiempo mejorara, aunque sólo fuera parcialmente. Ese jueves debíamos de haber subido al Piz Buin y cruzado luego al Refugio del Silvretta Hausse, pero llamamos para cancelar la reserva, visto el mal tiempo que hizo.

Así, pues, nos echábamos a dormir en nuestra 2ª noche en el Wiesbadener Hütte (suerte que hubiera sitio disponible para nosotros 6 para una noche extra...).

A las 5 AM me despierto y veo a Champi mirando por la ventana.

"El cielo está estrellado", me dice...
Me levanto y no doy crédito...
Era cierto. Estrellas. Ni una nube. Nada de viento...

Tras dos días grises, ver de nuevo el cielo estrellado era toda una bendición.
El mensaje se fue corriendo de habitación en habitación y, a diferencia de otros días, todo el mundo había sido muy madrugador para desayunar, con las mesas llenas ya antes de las 7 de la mañana.

Desayunamos sin prisas y preparamos las mochilas y el equipo para salir. Hablamos con Bru, David y Alba, unos catalanes que conocimos la noche anterior. Ellos también van a subir al Piz Buin, antes de cruzar luego al refugio de Silvretta Hausse. Con ellos compartiríamos luego parte de la arista final al Piz Buin.

Salimos de los últimos del refugio. Aunque aquí los grupos en general van a ritmos muy tranquilos, con mochilas muy grandes y habitualmente vamos adelantando durante cada jornada.
Hoy era un día de dejar salir primero a los guías, pues el trazado inicial , tras el medio metro de nieve caído el día anterior, era delicado. Siempre es mejor que trace un experto de la zona que conoce el lugar que nosotros mismos, más aún habiendo subido a Notable (3) el peligro por aludes.


Vídeo del día



Breve reseña:

Salimos del refugio siguiendo la huella de los grupos previos, en dirección sur pura, sin apenas ganar altura, en dirección al Piz Buin, al fondo.
La huella trazaba algunos rodeos, para montare en un lomo del que hay que bajar luego. El guía suizo recorrería todo el filo del lomo hacia el sur hasta llegar a la zona de menos pendiente por la que dejarse caer (con pieles), unos 30-40 m, a la olla, hacia el oeste.
Se continúa por el llano, bajo los seracs del Glaciar Ochsentaler, que quedan arriba a nuestra izquierda, hasta llegar a la primera pala del día.

Allí el guía suizo comenta a sus tres clientes que esperaran a que subiera las primeras zetas y que luego fueran subiendo separándose bien en dicha primera pala. Detrás de ellos íbamos nosotros, que también guardamos la distancia de seguridad. Esperamos nuestro turno y finalmente retomamos la ruta, tras ellos.

Tras subir esa primera pala hacia el oeste, vamos girando a la izquierda (al SSW), para luego remontar otra zona inclinada, con amplias zetas, acercándonos poco a poco a las contrafuertes rocosos del SilvrettaHorn, a nuestra derecha.

En la cota 2.780 aproximandamente, se sale a terreno más suave. Allí, para solidarizarnos con el guía (que llevaba abriendo huella todo el rato) les adelantamos, agradeciéndoles la huella, y les damos relevo, en la zona llana del glaciar.
Seguimos en dirección pura al Sur, relativamente cerca de las murallas de la derecha, evitando la zona agrietada central del glaciar situada a nuestra izquierda. 

Poco a poco iremos girando a la izquierda (al Este), sobre la cota 2.930 m (5 km en el track) en dirección al collado o brecha entre el Piz Buin y el Klein Piz Buin, a 3.056 m.

Allí es recomendable dejar los esquís y subir a pie (crampones/piolet) en diagonal, hacia la izquierda (Norte) para ir a buscar la arista del Piz Buin.

El exceso de nieve hacía difícil ver la ruta correcta. Hay que seguir en diagonal a la izquierda hasta llegar a la arista, que luego te lleva directa a la cima, subiendo por ella y pasando a ratos por el lado izquierdo, norte, en sombra.

Dejamos pasar al guía suizo con sus tres clientes y esperamos turno respetuosamente. El guía iba limpiando de nieve la arista con ambas manos y brazos, a lo Julio Benedé. Pues en muchos puntos la nieve cubría pasos de chimeneas que estaban ocultas. Es importante encontrar el diedro clave en la arista.

El trabajo de limpieza de nieve de la arista llevaba tiempo pero esperábamos detrás sin presionar, sin prisas. Soplaba fuerte viento y hacía frío, pero nos abrigamos bien con el plumas, gore, doble buff, casco y gafas de ventisca, de manera que, incluso estando parados y expuestos al viento, se aguantaba la meteo de forma cómoda.

Tras un par de chimeneas no difíciles (no sé cómo será sin nieve o con hielo, claro) se accede por fin a la pala final, muy tumbada, que se recorre a pie sin problemas.

Al fondo de la loma final, se ve la cruz de la cumbre. El guía suizo llega con sus tres clientes. Nos quedamos unos 10 metros antes, quietos, dejándoles que disfruten de la cima a solas.
Cuando bajan les agradecemos la huella y aprovechamos nuestro turno, subiendo a la preciosa cima del Piz Buin (3.312 m).

Detrás viene el guía catalán Bru (Bruno), junto a Dani y Alba (el trío que sale en la fotos de la arista en varias fotos). Nos felicitamos mutuamente e iniciamos el descenso de la arista, para no congestionar la ruta. El diedro se podía destrepar, con atención, sin necesidad de cuerda. Aunque es aconsejable llevar un cordino y algún tipo de sistema de descensor, pues según las condiones (mixo roca/hielo) puede ser recomendable montar un pequeño rápel.

Una vez de vuelta a los esquís, descendemos esquiando por la misma ruta de subida. No nos desviamos a la Fourcla de Cofin, pues no vamos a pasar al Silvretta Hauss (como era el plan previsto para el día anterior, si no hubiera hecho mal tiempo).

Tras recorrer la parte alta y llana del glaciar siguiendo la huella de subida (para no quedarnos parados), esquiamos luego unas fantásticas palas de moderada inclinación. La nieve estaba mucho más estable de lo que esperábamos.

En la cota 2.570 m decidimos seguir bajando directos a la izquierda, al fondo del valle, en lugar de seguir la ruta de ida. Ese descenso directo al norte, al fondo de valle, es el que también seguiría luego el guía suizo y su guía, detrás de nosotros.

Tras llegar a la cota 2.290 m, toca poner pieles de nuevo para remontar los 150 m de desnivel finales de vuelta al Refugio de Wiesbadener, completando una gran jornada de montaña de 7 horas.

Queríamos bajar esa tarde a la civilización, pero es tarde y eso sumaría 3 o 4 horas más de ruta, llegando muy tarde a buscar alojamiento en Ischgl.
Así que decidimos entre todos disfrutar de la tarde al sol en el refugio y, tras comprobar que tenían sitio para nosotros para una 3ª noche, quedarnos allí de nuevo.

Al día siguiente, el último, subiremos al Rohuer Kopf (como tresmil lanzadera) antes de bajar hasta Wirl y Galtur, cerrando así el círculo de esta Silvretta Traverse.

Continuará...

Jorge GD


El track, en el mapa de Google Earth



Esta es la vista que había desde el refugio, al amanecer, antes de que saliera el sol


Todo el mundo fotografiaba el Piz Buin esa mañana, tras 2 días sin verlo, por el mal tiempo
Su orografía empezaba a formar una nubecilla, que durante el día iría aumentando, haciendo que la escalada de su arista tuviera un carácter místico, entre el sol y las nubes...


Se sale en dirección al Piz Buin, sin ganar altura, antes de ir girando a la izquierda a tomar el lomo


Vamos siguiendo la huella universal


Las luces son fantásticas


Qué preciosidad


Al otro lado se ven las numerosas cordadas subiendo hacia el Dreiländer Spitze


Sombras


Y luces...


Detrás se ve el Refugio de Wiesbadener Hütte


Variedad de huellas y de destinos


Nosotros hemos llegado al filo del lomo, que recorreremos a la izquierda hasta encontrar el punto de pendiente más suave para dejarnos caer a la derecha


Mirando atrás


Bru, seguido de Alba y David


Texturas...
Estamos en abril pero las luces parecen de febrero


Bru, Alba y David, que no para de hacer fotos con el móvil


El viento ha esculpido olas en la nieve


Las nubes nos cubren lelgando a la primera pala del día
Separación de seguridad
Esperamos nuestro turno para subir, bien separados


Alfredo (de rojo) llegando a lo alto de la segunda pala


Ya en el glaciar, tomamos la delantera y vamos abriendo huella hacia el Piz Buin, desafiante, a la izquierda en la foto



Gracias por la foto Moraga


Silueteados


Las nubes juegan a entrar y salir y el sol empieza a iluminar con fuerza


Dejamos esquís en la base, en la brecha entre el Piz Buin y el Klein Piz Buin


Vistas al SE desde la brecha, antes de ponernos los crampones


Sopla fuerte, pero nos abrigamos para trazar la diagonal a la arista


Empezamos la arista, fácil inicialmente


Champi, iniciando la arista


Detrás, el guía suizo (de naranja) y sus tres clientes


Alfredo, en un pequeño diedro


Bru, seguido de Alba y David, que no deja de sacar fotos con el móvil
¿Dónde están esas fotos David? Jaja


La cosa empieza a ponerse seria


 Foto sacada por Ángel Moraga con su móvil


Gracias por la foto Moraga


Salimos al lomo final


Últimos metros a la cima



El grupo del guía, fotografiándose en la cima del Piz Buin
Gracias por la foto Moraga


Solos en la cima del Piz Buin (3.312 m)


Selfie en el Piz Buin


Volviendo por el lomo tumbado
Las vistas son espectaculares


Un balcón con vistas a los alpes austro-suizos


Con las nubes entrando y saliendo


Ángel y Alfredo


Juan, Alfredo y Enrique, destrepando un pequeño paso


De vuelta en el glaciar, esquiando por la ruta de subida


Mirando atrás al Piz Buin
Se puede adivinar la huella y la traza subiendo por la arista


Buenas palas de nieve polvo


Allí decidiríamos bajar directos a fondo de valle, a la izquierda, en lugar de seguir la huella de ida


Enrique Lardiés


Buenas palas


El guía suizo y sus clientes, disfrutando de las palas de nieve polvo


Y remando hacia nosotros en el tramo llano, antes de poner pieles todos para subir al refugio


Subida final al refugio


Vista atrás a nuesetras huellas de bajada
A la izquierda se ve la horizontal de la ruta de ida, de la mañana


Las estacas te llevan, sin pérdida, al refugio


Vista desde el refugio, del guía y su grupo


Qué bien sabe una cerveza al sol con estas vistas...


Nos quedaba sólo un último día de la Silvretta para volver a la civilización.

Continuará...