jueves, 28 de diciembre de 2023

La Iglesia de Wassen, que se ve 3 veces desde el tren camino de Göschenen. La increíble hazaña de la ingeniería suiza de trenes del siglo XIX

La Iglesia de Wassen, vista desde el tren el pasado sábado 2 de diciembre, Suiza Central, tras salir del 2º bucle

La Iglesia de Wassen, que se ve 3 veces desde el tren

 camino de GöschenenLa increíble hazaña de la ingeniería suiza de trenes del siglo XIX



Wassen es un pueblecito en Suiza situado en el cantón de Uri, a 936m de altura.
Cuando subes en tren desde Zúrich hacia Andermatt, pasas al lado de este pueblecito antes de llegar a Göschenen, donde cambias a tren cremallera si sigues subiendo a Andermatt.

El tren que viene de Zúrich, que no es tren cremallera, tiene que superar 300 m de altura en un tramo relativamente corto de trayecto.

Al no ser un tren cremallera, en el siglo XIX tuvieron que construirse 3 bucles circulares bajo la montaña con los que desmultiplicar la pendiente del tren para que éste puediera superar ese desnivel.

Así, en 1882 se abrió por fin esta línea de tren. A base de estos 3 enormes bucles circulares mediente túneles que atraviesan la montaña (ver foto a la derecha), de modo que, al igual que hacen las lazadas de una carretera de un puerto de montaña, el trayecto del raíl tuviera siempre una suave pendiente que permitiera a un tren convencional continuar el trayecto a la misma velocidad.

De modo que, cuando vas subiendo hacia el sur camino de Göschenen, desde el tren puedes divisar la Iglesia de Wassen en 3 ocasiones distintas y desde lados distintos. Inicialmente la ves encima de ti, a la derecha del tren. Tras el 2º bucle bajo la montaña, apareces de nuevo afuera para contemplarla, a tu altura, de nuevo a la derecha, pero con el tren "volviendo" hacia Zúrich, al norte. Por fin, tras completar el 3º bucle bajo la montaña, sales de nuevo de ella para ver la iglesia desde el lado izquierdo del tren, estando el tren ya muy por encima del pueblo, pues ya ha ido ganando toda la altura.

Cada vez que cogemos este tren, me maravillo con esta obra de ingeniería e intento visualizar la iglesia las 3 veces en que es posible hacerlo. Curiosamente, a pesar de pasar al lado de la Iglesia de Wassen hasta en 3 ocasiones, el tren NUNCA PARA EN WASSEN, para más inri!

Este tren sigue subiendo hasta Göschenen, donde la mitad del pasaje continuará a Airolo, cruzando por el Túnel del Gotardo (otra maravilla de la ingeniería suiza). La otra parte del pasaje se bajará en Göschenen, para cruzar la estación y montarse en el tren cremallera que, ya por pendientes inclinadas, te sube hasta Andermatt, uno de los mayores domininos esquiables de Suiza. Muchos esquiadores de pista paran en Andermatt para esquiar. Pero ese tren sigue hacia Realp, a 1.600m de altura, base de muchas rutas de esquí de montaña de invierno y primavera. Aún puedes seguir al Este, cruzando el Furkapass en el tren, para acceder a su vertiente Este, hacia Oberwald, antes de bajar hacia Fiesch o Brigg.

Os dejo aquí el enlace a un breve vídeo de youtube, grabado desde el emplazamiento de la Iglesia de Wassen, en el que se ve al tren pasando varias veces, en direcciones distintas, tras sortear los 2 bucles bajo la montaña que he mencionado. Merece la pena disfrutar de este viaje en tren, aunque sólo vayas a Andermatt/Oberalppass para disfrutar de las vistas. Si haces el viaje de ida y vuelta, podrás ver la Iglesia de Wassen desde el tren hasta 6 veces: 3 subiendo y otras 3 bajando.

Me encanta...

Jorge García-Dihinx Villanova, pediatra Low Carb High Protein, que no meteorólogo

jueves, 21 de diciembre de 2023

EL NIÑO MÁS FELIZ DE SABIÑÁNIGO: Manejo Low Carb de la Diabetes Tipo 1

Pablo, con sus botes de Eritritol, edulcorante sin glucosa que utiliza para la elaboracíón de sus bizcochos, pasteles y galletas "sin azúcar". Hay muchas formas de controlar la diabetes sin quitar alegría a los postres.


EL NIÑO MÁS FELIZ DE SABIÑÁNIGO: Manejo Low Carb de la Diabetes Tipo 1

Por Natalia Román


El niño más feliz de Sabiñánigo se llama Pablo. Semejante título fue auto-atribuido 
en mayo de este año. Sin embargo, 2023 no empezó exactamente de la mejor manera para él. El día 19 de enero Pablo fue diagnosticado con diabetes tipo 1 (DM1).  Un diagnóstico de diabetes es un shock para cualquier familia. En ese momento comienza un proceso de aprendizaje y familiarización con términos y rutinas relacionadas con esta enfermedad que nos ‘acompañará’ cada hora del reloj, para el resto de nuestras vidas.

¿Cómo es posible entender lo que “para siempre” significa cuando se es solo un niño? Por ello, es verdaderamente sorprendente que, pocos meses después de su debut diabético, Pablo se auto-denominara "El niño más feliz de Sabiñánigo"

El páncreas de una persona con DM1 ha sido atacado por su cuerpo y no es capaz de producir su propia insulina, hormona encargada de transportar la glucosa desde la sangre a todas las células de nuestro cuerpo para ser usada como fuente de energía, de vida. El reto principal de esta enfermedad es compensar con insulina administrada por el paciente la cantidad de glucosa que ha de ser transportada del torrente sanguíneo a las células. Demasiada insulina administrada puede matarle en cuestión de minutos por una hipoglucemia grave. Demasiada poca, y ese continuo azúcar alto en la sangre provocará un progresivo deterioro de tus arterias (grandes y pequeñas) y un deterioro de la calidad y de tu esperanza de vida. 

A día de hoy, las guías oficiales publicadas para el manejo de la DM1 no apoyan a los pacientes y familias que eligen eliminar el factor que mayor impacto tiene sobre la glucemia: la ingesta de carbohidratos.

En el caso de Pablo, yo misma pude hacer de Ratoncito Pérez y dejar debajo de su almohada (vía e-mail) una copia en español del libro ‘La Solución para la Diabetes’ – ojo, solución, que no cura - escrito por el Doctor Bernstein. Este tratado es considerado “La Biblia” del manejo de la diabetes con una dieta muy baja en carbohidratos. Su lectura abrió los ojos a Pablo y su familia y los llenó de optimismo. También de dudas, ya que este camino, como he mencionado, se desvía del manejo de las guías gficiales actuales.

La Hemoglobina Glicada (que mide la media de glucosa en sangre de los 3 meses previos) se usa como referencia para valorar el control de la diabetes por un paciente con DM1. Una persona sin diabetes está en un rango entre 4.5%-5.7%. Los estudios muestran el incremento exponencial del riesgo de Enfermedad CardioVascular por cada incremento del 0.1% a partir de un valor de 5.5%. Un diabético tipo 1 tiene el “objetivo” de tener una glicada de <7%. Sólo 1 de cada 10 personas con DM1 consigue ese objetivo. Pablo y servidora mantenemos una Hemoglobina glicada de 4.8% (como una persona sin diabetes), a base de reducir de forma importante la ingesta de carbohidratos. Como dice el Dr. Bernstein : "Lo que funciona, funciona".

La evolución de la glucemia de Pablo en los siguientes tres meses a su diagnóstico – virtualmente en valores no diabéticos - le llevó a concluir que, gracias a aplicar el protocolo del Dr. Bernstein, se había convertido en "El niño más feliz de Sabiñánigo"

A pesar de controlar su glucemia de forma excelente, Pablo, al igual que cualquier otro DM1, tiene que lidiar con múltiples inyecciones diarias, comprobaciones de glucemia en sangre, cálculo de insulina para cubrir la proteína y los carbohidratos.

Pablo es un niño normal, algo que la diabetes podría haberle arrebatado. Acude a la escuela sin grandes preocupaciones sobre niveles muy altos o bajos de glucemia. Juega sin descanso con sus amigos y hermanos. Es un gran concertista y su carácter alegre y social le hace ser querido por sus profesores y compañeros. 

La única diferencia entre Pablo y sus compañeros, además de gestionar su diabetes de forma autónoma, es que, en lugar de desayunar un bowl de cereales, él come dos huevos revueltos. En lugar de tomar un plato de espaguetis, una manzana o un batido de chocolate, él decide tomar unas judías verdes, un filete de ternera y termina su comida con una deliciosa galleta hecha con harina de almendra y coco.

Algunos dicen que esta forma de alimentarse no es sostenible para los adultos y todavía menos para los niños. En mi opinión y experiencia, cualquiera que piense así evidentemente no sabe lo que es gestionar una diabetes tipo 1 con grandes cantidades de ingesta de carbohidratos y sus consecuentes dosis industriales de insulina. 
Mi pequeño granito de arena en este viaje de Pablo y su familia hacia una vida libre de complicaciones diabéticas ha sido el asesoramiento, dentro de mis posibilidades y desde la falta de formación médica, a lo largo de este último año. A cambio he recibido unas cantidades inmensas de amor y lecciones diarias de responsabilidad, madurez, y amor por uno mismo. 

Fue en enero de 2023 cuando yo misma decidí buscar ayuda profesional para poder gestionar la carga mental, el estrés psicológico, de una vida con diabetes. Para mi mente racional es fácil entender que, si hago una gran ofensa a mi glucemia - es decir, desayuno un croissant - habrá consecuencias negativas. Sin embargo, me resulta muy complejo aceptar ese componente de libre albedrío, completamente impredecible, que ocurre alrededor del 10-15 % de las veces. ¿Por qué, si he seguido todos los consejos al pie de la letra, el resultado no tiene sentido?
Ver cómo Pablo se enfrentaba al mismo problema y su nivel de autoexigencia, siendo tan alto o mayor que el mío, me ponía delante de un espejo de contradicción. ¿Cómo puedo yo decirle a Pablo que acepte esa ración de entropía cuando yo misma estoy profundamente afectada por ella? 

El resultado es que la fortaleza y determinación de Pablo y su familia han sido mi propia terapia. Perpetuando ese círculo de dar y recibir que esta “maldita“ diabetes nos ha regalado y nosotros decidimos pro-activamente aprovecharlo como si no hubiera un mañana, pero también como si la vida fuera a durar para siempre. 

Y es así como el niño que tenía todas las papeletas para convertirse en el más triste del lugar en este 2023, tomó la riendas de su salud y, contra todo pronóstico, se auto-proclamó el niño más feliz de Sabiñánigo.


Por Natalia Román (DT1)


Jorge García-Dihinx Villanova, pediatra Low Carb High Protein, que no meteorólogo

miércoles, 13 de diciembre de 2023

Bisisthal, polvo total, 29 nov 2023, Muotathal, Suiza Central

En la segunda subida del día, más fácil sobre la huella ya hecha y además, con sol


Bisisthal, la cabecera del Valle de Muotathal, en la Suiza Central

Miércoles 29 noviembre 2023

D+ 1.320 m     4 h 45 min

El track: en Strava, en Wikiloc


Introducción:


Acabo de terminar 2 semanas de vacaciones que me guardé del verano para aprovechar en Suiza con Natalia, cogiendo la última semana de noviembre y la primera de diciembre, aprovechando el Puente de Constitución/Inmaculada.

Era una moneda al aire, pues no siempre comienza a final de noviembre la temporada de skimo en Suiza, aunque siempre hay algún lugar donde esquiar a finales de mes.

Lo que no esperábamos fueron las copiosas nevadas que cayeron los últimos 10 días de novimbre, dejando una Suiza con nieve desde el fondo de los valles.

Conseguimos sacar 10 días de skimo en esas 2 semanas mágicas. Hubo días buenos y hubo 3 espectaculares, de esos que sale un día de cielos azules tras 24-48 h de nevadas. Además, el Peligro por Aludes estuvo en Notable (3), bajando rápidamente a 2 (Limitado) para la primera semana de diciembre, una maravilla, pues nos abría muchas posibilidades para esquiar por distintos valles de los Alpes Suizos.


Bisisthal, invierno total... miércoles 29 noviembre 2023

La últimas semana de noviembre estuvo nevando en Suiza hasta cotas de 1.000m, con tiempo algo revuelto el fin de semana del 25-26 y, tras un lunes de transición, gris pero seco, llegó una gran nevada el martes 28 de noviembre, antes de la gran ventana de sol y frío prevista para este miércoles 29 de noviembre.

Este día teníamos que devolver el coche (alquilado por horas) a las 14 h, así que madrugamos más que los propios suizos para ir a Bisisthal, la cabecera del valle de Muotathal, cerca de casa (Arth-Goldau) en la Suiza Central.

Los días previos había estado nevando, bajando la cota de nieve a sólo 500 m.
Salíamos de 1.000 m de altura, recién limpiada la carreteras por el quitanieves. Nieve polvo desde la barrera, con -6ºC en la primera subida.

Costaba abrir huella, pero el paisaje de alrededor hacía que te olvidaras del trabajo. Para optimizar el día, tras los primeros 700 m de subida abriendo profunda huella, decidimos esqiuiar y así aprovechar nuestra huella para subir rápidos sobre ella para un 2º descenso.

La nieve estaba seca y muy rápida. Suelta, no venteada, ideal. A duras penas podía seguir a Natalia bajando. Fotaba con sus esquís con patín de 105 mm. Ella bajaba el doble de rápido que yo con mi patín de 85mm de mis Movement Race Pro. No me llegaron a tiempo las fijaciones para mis próximos esquís de 95 mm de patín que espero estrenar en 2024.


Fueron cerca de 5 horas de actividad. Una ventana mágica de buen tiempo tras 2 días de nevadas y previa a otros 2 días de nuevas nevadas.

Loïc se curró el 70% de la huella, Natalia un 20% y yo un 10%, yendo la mayoría del tiempo en "3ª clasa" o "vagón restaurante", desde donde tenía tiempo de hacer fotos y vídeos de este día glorioso, precioso.


Componentes: Loïc Tregan, Natalia Román y Jorge García-Dihinx


Dejo un pequeño vídeo que hice de 59 segundos en mi cuenta de Instagram

(aunque aquí, en bruto, sin música)




Y dejo aquí algunas fotos del día

Comenzamos a 6ºC bajo cero, muy prontito


La primera subida fue fría (sin sol) y dura, abriendo huella


Pero el paisaje era tan bello, que el esfuerzo y el frío ni nos molestaban



Subimos por la pista para luego bajar por el centro del bosque



Ya en terreno alto, fuera del bosque


Primera subida, sin ve el sol... Era bien temprano



Nieve polvo profunda, ideal


Foto de la bajada


En el bosque encantado



La segunda subida, ya con sol, más agradable


A por ella!


Al fondo el afilado pico Windgällen

Aún no me puedo creer que lo hiciéramos el año pasado el mismo día que cogía el avión de vuelta esa tarde/noche... Ufff, lo conseguimos


Precioso paisaje nevado a nuestras espaldas...


En la segunda subida ya vemos nuestras huellas de la 1ª bajada




Un día para recordar...

Pero esta quincena sólo acababa de comenzar.
Habrá más rutas espectaculares entre final de novimebre e inicios de diciembre.

Continuará...

lunes, 11 de diciembre de 2023

El sueño inducido por pastillas no genera un sueño con una arquitectura natural, reparador (aunque te permita dormir)




El sueño inducido por pastillas no genera un sueño con una arquitectura natural, reparador (aunque te permita dormir)

Este domingo tenía que coger el vuelo de las 7 AM en Zúrich para volver a Barcelona. Eso implicaba coger el tren de las 5 AM y levantarme a las 04:25 AM

A las 10:30 PM, la tormenta que azotaba Goldau, con fuertes vientos, no me dejaba dormir. Los nervios por el madrugón del día siguiente elevaban mi cortisol, una hormona que no puede compartir habitación con la melatonina, que seguía agazapada, sin salir.

En esos momentos de desesperación, un inductor del sueño de corta duración (5 h) como es puede ser el zolpidem, puede salvarte la noche, como así fue.

Sin embargo, las pastillas para dormir son un parche para situaciones puntuales y no deben utilizarse para el día a día. Los inductores del sueño o laos sedantes tipo benzodiacepinas, ambos utilizados para ayudar a coger el sueño, no permiten la generación de un sueño con la arquitectura reparadora de un sueño logrado de forma natural. Su uso continuado está asociado a mayor mortalidad y mayor incidencia de cáncer. Un sueño no reparador no nos "onco-protege", al diezmar nuestras células "Natural Killer".

En la imagen de la izda, la arquitectura del sueño es "artificial", con poca variación de fases de sueño profundo/ligero no REM y sueño REM (rosa). Nos permite dormir pero no es, para nada, regenerador como lo sería un sueño natural.

La noche siguiente, tras haber conducido desde Barcelona y llegar a casa, estaba tan agotado que me eché a dormir a las 10:06 PM y me dormí a las 10:11 PM, según me dice mi Garmin.

La arquitectura de ese sueño sí que es de calidad, con una alternancia de ciclos de sueño no-REM en las fases iniciales, tendiendo a ciclos con más fases REM (rosas) hacia el final de la noche, como suele ser en un sueño normal.

Por eso, para conseguir dormir, las pastillas son sólo un parche puntual a utilizar en casos de preocupaciones que no hayas podido solucionar antes de irte a la cama, pero no debe de ser la solución habitual.

La Terapia Cognitiva Conductual para el Insomnio es más eficaz. Soluciona el problema, baja tu cortisol. A veces puede bastar con escribir, en un papel, ese "Diario de Preocupaciones", antes de irte a dormir. Escribir todo eso que nos preocupa, escribir las posibles soluciones, "vomitar" ese nudo del estómago que ayuda al cerebro a relajarse y reducir ese cortisol que te impedirá dormir.

No utilizo un anillo Aura para ver cómo es mi sueño. De momento lo hago con la app del reloj. Pero en el caso de ayer y de anteayer, viendo ambos hipnogramas o gráficas del sueño, es clara la diferencia entre dormir de forma natural y dormir tras inducir el sueño con pastillas, un parche sólo para situaciones de emergencia, sin ser la solución.

La solución pasa por seguir los consejos de la Terapia Cognitivo Conductual para el Insomnio (TCCI). Podéis conseguir más información sobre este tipo de terapias en la web de Zigor Madaria, un excelente cardiólogo, un poco alejado de la medicina ortodoxa en algunas de sus prácticas diarias. Para mí, un excelente profesional.