viernes, 28 de junio de 2019

Circular con Tuca y Kilian: La Sarra - Respomuso - Musales, Sallent de Gállego 26 jun 2019

 Tuca haciendo caso de las recomendaciones para esta ola de calor, hidratándose por fuera y por dentro, camino del collado de Musales

Circular con Tuca y Kilian:
La Sarra - Embalse de Respomuso - Collado de Musales

26 junio 2019
Sallent de Gállego, Valle de Tena

Distancia: 17 km
Desnivel: 1.200 m
Horario: 3 h
El track. https://es.wikiloc.com/rutas-carrera-por-montana/circular-la-sarra-respomuso-musales-26-jun-2019-38069926

Escapamos de la ola de calor y nos subimos al embalse de la Sarra (Sallent de Gállego) para hacer esta circular que tantas veces hemos realizado. En lugar de iniciarla en Sallent, subimos hasta la Sarra para empezar con más fresco y volver allí con el coche a la sombra. El tramo final a Sallent lo haríamos ya con demasiado calor así que mejor quedarnos algo más arriba.

La ruta se puede trazar íntegramente con zapatillas. Sólo quedaba un pequeño nevero que se cruza en diagonal camino del collado final. Pero con esta ola de calor, esta fin de semana ese nevero seguramente ya será historia.

Qué bien se lo pasan Tuca y Kilian en el monte, verdad chicos?

Nada más por hoy,

Jorge GD

Os dejo un breve vídeo del día




Y unas pocas fotos del día

El track sobre el mapa 3D de Google Earth


Vista atrás hacia los ibones de Campo Plano y la Facha-Cambalés


Un bañito camino del collado de Musales


Tuca y Kilian, una vez más, en el collado de Musales


Tuca y Kilian, en el collado de Musales, listos para bajar de vuelta a La sarra


Qué bien se está en el sofá, verdad chicos?

https://es.wikiloc.com/rutas-carrera-por-montana/circular-la-sarra-respomuso-musales-26-jun-2019-38069926

sábado, 22 de junio de 2019

Alta Ruta Silvretta, 7º y último día: Wiesbadaner Hütte - Rahuer Kopf (3.101) - Descenso final a Wirl, 6 abril 2019



Alta Ruta Silvretta, 7º y último día:
Wiesbadener Hütte - Rahuer Kopf (3.101) - Descenso final a Wirl

Alpes austriacos, 6 abril 2019

Desnivel ascenso: 700 m
Desnivel descenso: 1.500 m
Distancia: 18,7 km
El track: https://es.wikiloc.com/rutas-esqui-de-montana/silvretta-dia-7-wiesbadaner-hutte-rahuer-kopf-descenso-final-a-wirl-6-abril-2019-37890630

Aunque estamos ya en verano y queda muy lejno este último día de nuestra Alta Ruta de la Silvretta, he querido completar la travesía, para quien quiera tener referencias para otro año. Se me han ido acumulando tareas los últimos meses y hasta ahora no había podido poner con esta última etapa. Mejor tarde que nunca.

Aunque era el 7º día de ruta, fue realmente el 6º día de actividad, pues la meteo hizo que no hubiera "5º día" de travesía, pues lo pasamos en el refugio viendo nevar. El 6º día fuimos al Piz Buin en ida y vuelta desde el refugio de Wiesbadener.

Este sería pues el último día, el 6º día actividad de los 7 posibles en nuestra semana de vacaciones. Un verdadero éxito poder aprovechar 6 de los 7 días disponibles.

Sería el día de regreso a Wirl, donde se coge el ski-bus que baja hacia Galtür y a Ischgl.
Mirando el mapa, vimos que había un tresmil bastante a mano en la ruta de vuelta a Wirl, bajando por el valle de Bieltal, al norte.

El día volvió a salir limpio, como el del Piz Buin, aunque no tendríamos tan buena nieve ese día. Se sale por la parte de detrás del refugio del Wiedbadener Hütte (2.443 m) y se remonta una loma, en dirección Este, en sombra por la mañana, elevándonos a un altiplano a 2.600 m, donde seguimos en dirección NNE y, tras subir otra loma, alcanzamos un amplio llano en la cota 2.700m.
En lugar de ir directos al NE hacia el Collado de Bieltal, vamos ascendiendo al ESE por la amplia y suave cuenca del glaciar del Raukopfgletscher, camino del Rahuer Kopf, cuya cruz de la cima ya se intuye, a la izquierda del collado o brecha final.

La ascensión no tiene pérdida. Las últimas rampas a la brecha cogen algo de pendiente y vamos trazando zetas hasta la brecha o collado, en la cresta.
Allí dejamos los esquís y seguimos hacia la izquierda (Norte) con crampones y piolet por la cresta, que no es difícil. Sólo tiene algún paso sencillo de I grado, sin más. No es corta la travesía a pie por la arista, haciéndola aún más bella, con los cortados a nuestra derecha que caen al glaciar del Jamtal.

El Rahuer Kopf (3.101 m) es un fantástico tresmil, gran mirador de toda la zona y que nos permite descubrir todas las etapas realizadas los días previos desde el Jamtal Hutte. También tenemos una vista privilegiada del Dreiländer Spitze, que hicimos bajo las nubes, sin apenas visibilidad y donde más difícil se tornó la escalada final. Hoy se veía muy apto, con la huella de otros esquiadores que se acercaba a la arista final.

Tras volver a por los esquís a la brecha, iniciamos un descenso franco hacia el norte, para tomar el eje del largo Valle del Bieltal, que baja hasta la cola del lago Silvrettastausee y el collado Bielerhöne, equivalente al puerto del Tourmalet en el Pirineo.

En esta época, la carretera (como la del Tourmalet) está cubierta de nieve y, bien pisada, la han convertido en una perfecta pista de esquí de fondo.
Para llegará allí nos dejaríamos caer por todo el Valle del Bieltal, con una "curiosa nieve costra", que no nos permitía salirnos mucho de la huella central, a riesgo de caernos.

Una vez en la pista de esquí de fondo, empezaba una actividad de "esquí patinador", donde cada uno sacó a relucir sus dotes de fondista, especialmente Champi, que aprovechó la ocasión para darle cera y acelerar hasta Wirl (1.660 m), donde finalmente cogeríamos el Ski-Bus para volver a Ischgl, fin de trayecto.

Esa tarde la pasaríamos paseando por las preciosas calles de Innsbruck, antes de coger el vuelo de vuelta allí mismo, al día siguiente.

Terminaba aquí una bella semana en los Alpes de la Silvretta. Una zona de amplios y suaves relieves, sin apenas grietas, apta para cualquier nivel de esquí de montaña. En esta ruta, las cimas son completamente opcionales y algunas requieren de la habilidad del montañero en trepar y destrepar pasos de dificultad intermedia que, en alguna ocasión, pueden requerir el uso de la cuerda. Nosotros no tuvimos que utilizarla en toda la ruta, pero todos los grupos llevaban arnés, cuerda y demás tornillería colgando. Para nuestro gusto, demasiado peso y demasiado grandes las mochilas, en general, en esta zona, si lo comparamos con las mochilas de otras rutas de los Alpes.

Buena zona para disfrutar del esquí y de nieve polvo, sin grandes alturas ni peligros como podríamos encontrarnos en zonas más altas como, por ejemplo, el Oberland.

Muy recomendable, aunque la meteo no siempre acompañará. La nieve polvo es frecuente aquí. Pero claro, si hay nieve polvo con frecuencia es porque nieve con frecuencia y porque el frío continental la mantiene así. 
El tener nieve polvo y varios días de sol es ya una suerte que hay que correr. Nosotro tuvimos mejor tiempo que nieve, pero creemos que, en general, tuvimos suerte con la combinación de nieve, meteo y posibilidad de realizar las etapas.

Las cimas se consiguieron, lo pasamos bien y no hubo ningún percance. Qué más se puede pedir?

Hasta la próxima primavera...
¿Qué destino saldrá para el 2020?



Vista desde el refugio al amanecer, con las huellas del día anterior volviendo del Piz Buin


Salimos por detrás del refugio. Detrás de nosotros, el Piz Buin


Otro día limpio...


Nuestra cima, el Rahuer Kopz, es la que tapa la salida del sol, a la izda de la brecha


Vamos hacia la brecha de la izquierda de la foto


La brecha o collado se ve muy evidente, así como las huellas


Mirando atrás, el valle por el que bajaremos hacia Wirl


Texturas en la sombra


Enrique y Alfredo, llegando a la brecha o collado


Enrique y Juan, mano a mano en la cresta final


Pequeñas trepadas entretenidas, no difíciles


Preciosa travesía aérea


Rampa final de nieve hacia la cima


Al fondo el DreilÑänder, detrás de Moraga y Alfredo


Enrique y Juan, llegan a la cima


Aquí se puede ver la ruta normal al Dreiländer y la cruz en su cima


El amplio valle del Jamtal ofrece un variado ramillete de rutas con esquís, sin grandes dificultades


Foto de grupo en la última cima de nuestra Alta Ruta


Rahuer Kops, precioso tresmil y mejor mirador de la Silvretta


Volviendo hacia los esquís


Alpes en todo su esplendor


Bajando hacia el valle del Bieltal


Detrás a la izquierda queda nuestra brecha o collado


Bajamos por un poco de nieve polvo, antes de pillar la costra que vendría luego...


#graciasporlafotomoraga


Las huellas sin giros traducen esta nieve "enganchona" que no dejaba girar bien.
Es lo que tiene que, por un día en esta zona, hiciera calor el día anterior


Lo más seguro, ir por la huella...


Y colorín colorado, a Wirl hemos llegado!

Fin de trayecto!

Champi, Enrique, Alfredo, Juan, Ángel y un servidor


Aquí se puede ver, de un vistazo, toda la ruta de la Silvretta, de principio a fin
Falta la parte de desvío a la zona de suiza de Silvrettahausse, donde no pudimos ir por mal tiempo.


 Innsbruck, precioso


 En un magnífico restaurante en el centro antiguo de Innsbruck
#graciasporlafotoenrique


Juan fotografía el amanecer, en el aeropuerto de Innsbruck, antes de subir al avión que nos llevaría a Frankfurt y, desde allí, otro a Barcelona

Y esto ha sido todo, señores

A ver qué sale para el año que viene
Jorge GD

jueves, 20 de junio de 2019

Estabilidad glucémica de un ciclista con Diabetes Tipo 1: 4011 km en 20 días con una dieta cetogénica


Estabilidad glucémica de un ciclista con Diabetes Tipo 1: 4011 km en 20 días con una dieta cetogénica

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/31197870

 14 junio 2019





Introducción: Los beneficios del ejercicio regular en personas con diabetes tipo 1 son bien conocidos e incluyen reducciones en las complicaciones cardiovasculares, Índice de Masa Corporal, hipertensión y mejoras en el control glucémico.
A pesar de esto, el seguimiento de su práctica sigue siendo subóptimo, con  el riesgo y el temor de que la hipoglucemia como una barrera significativa.
A pesar de los esfuerzos para reducir la variabilidad de la glucosa en la sangre a través de reducciones de insulina anticipadas y el consumo de carbohidratos, el control glucémico durante el ejercicio sigue siendo complejo e impredecible siguiendo la clásicamente recomendada dieta alta en carbohidratos.
Para el control óptimo de la glucosa en sangre se deben considerar numerosas variables, entre ellas la intensidad del ejercicio, el tipo, la duración, la hora del día, la insulina circulante, la absorción de insulina y ajustarla a la ingesta de hidratos de carbono.
Las dificultades para anticiparse y dar cuenta de estos factores en tiempo real, pueden llevar a una hiperglucemia (azúcar alto) prolongada y significativa, a una hipoglucemia (azúcar bajo), o a ambas. La clásica montaña rusa de las personas diabéticas que ingieren un 50-55% de calorías de su dieta proviniendo del macronutriente que peor toleran, los carbohidratos.

Se ha demostrado que las dietas bajas en dicho macronutriente que tan mal controlan, los carbohidratos (incluida la cetogénica) reducen la variabilidad del azúcar en sangre (glucemia) en personas con diabetes tipo 1 [Turton 2018, Leow 2018]. Una dieta que limita la ingesta diaria de carbohidratos a 20–50 g se clasifica como una dieta cetogénica, muy baja en carbohidratos. Pero de momento, en el contexto del ejercicio, se conoce mal el impacto de la dieta cetogénica de muy bajo contenido de carbohidratos en el control glucémico y en el riesgo de hipoglucemia.




Presentación del caso: En este estudio presentan el caso de un hombre de 37 años con diabetes tipo 1 que realizó con éxito una larga ruta en bicicleta de 4011 km en Australia durante 20 días consecutivos (con varios días de más de 250 km) mientras consumía una dieta cetogénica muy baja en carbohidratos.
Su alimentación se basaba en cafés con mantequilla y aceite MCT, huevos, bacon, aguacates, espinacas, champiñones, salsa holandesa (hecha con huevos, mantequilla y zumo de limón o vinagre), nata, pollo, queso, lechuga y tomate, principalmente.

Durante los 4 años anteriores a esta ruta de 20 días sobre la bicicleta el paciente mantuvo una dieta muy baje en carbohidratos y alta en grasas (tipo cetogénica), con un contenido de CH inferior a 15-30 g/día.
Antes de comenzar su dieta cetogénica, su HbA1c (Hemoglobina glicada, que estima la media de glucosa en sangre de los últimos 3 meses), era de 6.8 % (en personas sin diabetes suele oscilar entre 4.5 y 5.6 %), con niveles de glucemia (glucosa en sangreI de entre 70 y 180 mg/dl la mayoría de los días. Tras adoptar la alimentación baja en carbohidratos su Hemoglobina glicada disminuyó al 5% (rango no diabético). Conviene recordar que las complicaciones cardiovasculares de los pacientes con diabetes empiezan con valores por encima de 5.7%, aumentando de forma progresiva conforme aumentan los valores de HbA1c. Y durante este tiempo no tuvo ningún episodio de cetoacidosis ni de hipoglucemia que requirieran asistencia.


La captura continua de datos de la monitorización de la glucosa fue del 98.4% durante la duración del viaje y mostró una estabilidad glucémica notable, con una desviación estándar de sólo 37 mg/dl  (promedio de glucosa intersticial de 110 mg/dl) y el 80.4% del tiempo invertido dentro de un rango de 70 a 180 mg/dl.
 La glucosa intersticial fue inferior a 55 mg/dl durante el 2.1% de este tiempo, solamente con un único  episodio de hipoglucemia sintomática que provocó una breve interrupción del ejercicio para la administración de carbohidratos. Un episodio durante 20 días consecutivos de ejercicio intenso y 4.011 km sobre una bicicleta.


Media de glucosas en sangre durante los 20 días de actividad ciclista.
Los valores de glucosa están en milimoles/L (para convertir a mg/dl, multiplicar x 18)
Por ejemplo: 5 mmol/L x 18 = 90 mg/dl de glucosa en sangre

Discusión del caso: La variabilidad glucémica, tanto la hiperglucemia como la hipoglucemia, es una barrera importante para el rendimiento óptimo del ejercicio en las personas con diabetes tipo 1, incluso en los atletas de resistencia de élite. Las pautas actuales recomiendan 30–90 g de carbohidratos por hora de ejercicio de resistencia para cumplir con los requisitos de energía y evitar la hipoglucemia, sin embargo, a pesar de seguir estas pautas, la variación inter e intraindividual, incluso para atletas experimentados, es considerable, con hiperglucemias e hipoglucemias frecuentes.
Por ejemplo, en un estudio de seis ciclistas experimentados con diabetes tipo 1 que realizaron una prueba ciclista de varios días, todos los ciclistas experimentaron una marcada inestabilidad de la glucosa, dos de ellos con hipoglucemias graves a pesar del consumo adicional de carbohidratos y ajustes de la insulina [Yardley 2016].

Comparativamente, la estabilidad de la glucosa del ciclista y la infrecuente hipoglucemia  fue sorprendente. La desviación estándar de sus niveles de glucosa en sangre durante el viaje de 20 días fue de 37 mg/dl (promedio de glucosa de 110 mg/dl), con solo el 4.9% del tiempo con una glucosa en sangre superior a 180 mg/dl. Si bien esta reducida variabilidad se ha observado en personas con dietas bajas en carbohidratos (incluida la cetogénica) [13–14], por lo que sabemos, esta es el primer caso publicado que examina la implementación de una dieta de este tipo en un atleta de ultra-endurance con diabetes tipo 1.
Una de las ideas clave que se obtuvieron con el experimento del ciclista fue que tal estabilidad podría lograrse sin depender del consumo regular de carbohidratos para mantener la glucosa estable en sangre debido a la reducida variabilidad glucémica observada con dietas cetogénicas, muy bajas en carbohidratos. Esta ventaja también podría extenderse a estos individuos cuando hacen ejercicio.

Los datos del control continuo de glucosa también mostraron que el ciclista mantuvo unos niveles de glucosa en la sangre que se considerarían convencionalmente dentro del rango de hipoglucemia de leve a moderada (56-68 mg/dl) durante el 12.7% del período de 20 días, tiempo durante el cual no tuvo síntomas. Esto es consistente con los hallazgos de (Leow 2018), lo que sugiere que las dietas muy bajas en carbohidratos pueden disminuir el umbral de hipoglucemia e hipoglucemia sintomática.
En el contexto de las dietas cetogénicas, el aumento de la disponibilidad y la utilización de los cuerpos cetónicos por un cerebro keto-adaptado (como un motor híbrido, que admite energía tanto de los c cetónicos como de la glucosa, versus un cerebro gluco dependiente) puede compensar la disponibilidad reducida de glucosa, lo que reduce el umbral para los síntomas neuroglucopénicos, aunque solo hay datos limitados que apoyan esta hipótesis [Amiel 1991].




Conclusiones: El presente caso demuestra la viabilidad de una dieta cetogénica (Muy baja en carbohidratos) en una persona con diabetes tipo 1 realizando ejercicio continuo de ultra-endurance. Si bien el efecto de una dieta cetogénica muy baja en carbohidratos aún no se ha examinado más ampliamente en los atletas con diabetes tipo 1, la estabilidad de la glucosa observada sugiere que la keto-adaptación (el cambio del metabolismo para optimizar y priorizar los ácidos grasos como principal fuente de energía en lugar de la glucosa) puede atenuar los cambios glucémicos y reducir la dependencia del consumo de carbohidratos durante el ejercicio para mantener la euglucemia (niveles normales de glucosa en sangre).

J Nolan1, A. Rush2 and J. Kaye1

1 Department of Endocrinology and Diabetes, Sir Charles Gairdner Hospital, Nedlands and 2 Type 1 Diabetes Family Centre, Osborne Park, WA, Australia

miércoles, 19 de junio de 2019

¿EL SOL ES BUENO O ES MALO? VITAMINA D Y SALUD, Entrevista Aragón TV en Otro Punto de Vista, 18 junio 2019



¿EL SOL ES BUENO O ES MALO? VITAMINA D Y SALUD

Entrevista Aragón Televisión
Programa  Otro Punto de Vista, 18 junio 2019

Ayer martes tuve la oportunidad de intervenir durante algo más de 10 minutos, un vez más, en el Programa Otro Punto de Vista de Aragón Televisión.

El tema era ver los beneficios para la salud de la exposición al sol (y los peligros si nos quemamos al sol).

En futuras entradas entraré más en detalle en los beneficios de una exposición responsable al sol durante la vida; de los perjuicios de evitar el sol durante nuestra vida y de las múltiples funciones de la vitamina D (pro-hormona) sobre muchas esferas de nuestra salud, más allá de la regulación del metabolismo del calcio y los huesos.

Espero que os resulte interesante.

Nos vemos en futuras entradas,

Jorge García-Dihinx Villanova

miércoles, 12 de junio de 2019

Carrera Peña Canciás 27 K... cada año más rápido! Fiscal 9 jun 2019

 Llegando bajo el muro de la cadena, donde Ramón Ferrer "Monrasin" suele situarse cada año
Buenas sensaciones este año en este punto, una vez pasado el ecuador de la ruta

Carrera Peña Canciás 27K... cada año más rápido!

Fiscal, 9 junio 2019

Distancia: 27 km
Desnivel: 1.600m
Horario: 3 h 14 min
El track: https://es.wikiloc.com/rutas-carrera-por-montana/carrera-pena-cancias-fiscal-37481451

Vamos cumpliendo años; uno cada año. Sin embargo, en estos tres años he conseguido, año tras año, rebajar el tiempo del año anterior.
El año pasado fue fácil, pues tenía de referencia del tiempo de la pájara de mi primera participación. Este año, sin embargo, me conformaba con mantener mi tiempo del 2018. En el 2018 llovió mucho y, aunque el barro hacía que bajáramos con más prudencia, el fresco a mí me hace rendir mejor y sé que hice una carrera muy buena. Me dejé la piel.
Con el ambiente más cálido de este año no esperaba mejorar el tiempo del año pasado. Pero sí que lo mejoré y vaya que si lo hice.
Lo pude recortar en casi 6 minutos! Y yo que subía asfixiado, pensando que iba "flojo"... Lo que ocurría es que iba demasiado rápido. Al menos, el crono así lo reflejó en carrera.
Al final, 11º puesto absoluto.
Los años pasan... pero la juventud se resiste a marcharse, de momento (...).




Aquí sólo puedo comentar la carrera que yo hice. No puedo comentar la carrera en general, de los otros participantes, porque ellos iban bien delante o bien detrás. Sólo puedo comentar mis sensaciones, para el que quiera leerlas, sin aburrirse demasiado.

Para conocer mejor cómo se desarrollaron las diferentes carreras, podéis leer la habitual crónica de nuestro querido Miguel Ferrer, alias "Monrasin", en su magnífico blog Corriendo por la Sierra.



 Junto a mi compañero Ángel Moraga (https://casteret.es/) que este año fue el fotógrafo en salida y meta
#graciasporlasfotosmoraga

Pues señor García-"Dinnix"... no le vemos en la lista de inscritos... ¿Está seguro de que realizó el pago de la inscripción?
Pues sí, señor Parra... ¿Pero lo ha mirado bien? Mire que es un apellido bien raro... ¿No será que lo escribirían mal?
Que le prometo que me inscribí...
Pregunten a Moraga, que el les confirmará...
Pero... ¿me dejarán correr, verdad que sí?
Mírelo bien... se escribe D I H I N X... así sí?
Ufff... memos mal


Mi humilde crónica de la carrera:

Esa mañana me levantaba 3 horas antes de la carrera y me metía sigilosamente en la cocina, sin hacer ruido, para hacerme, en una sartén con un poco de aceite de coco, una tortilla con 2 huevos, jamón y queso, junto con mi taza de café con leche...
Pero Tuca y Kilian saben que, cuando uno se levanta pronto, a veces, es para llevarles a correr la 10K de Chimillas con el fresco de la mañana, así que pronto asomaban por la puerta.

Esta vez no me los podía llevar conmigo (una de las pegas de las carreras "con dorsal"), así que, tras desayunar sin hacer demasiado ruido, me visto "de paisano", con vaqueros y ropa "normal", como si fuera a trabajar. Si me ven ponerme las mallas de correr y las zapatillas se habrían muerto de pena al verme salir sin llevármelos (lo mismo cuando me voy a esquiar sin ellos... que me voy vestido "de paisano" para que no se queden tristes. Les chifla irse al monte con nosotros).

En el viaje en coche a Fiscal me como una manzana, tomo una pizca de sal y voy bebiendo agua de vez en cuando.

Llego a Fiscal a las 8:15 AM, 45 min antes de la salida. Recojo mi dorsal y saludo a algunos amigos antes de cambiarme y prepararme para la salida. Ha llovido por la mañana, pero parece que se está despejando. La prueba será seca e irá despejando, pero las nubes de la primera mitad nos vendrán bien para refrescarnos.
Antes de ir a la salida, una imprescindible última visita al baño, que parar a "eso" en carrera rompe mucho el ritmo.

Me acerco a la salida y troto unos minutos por las calles de Fiscal, para no salir demasiado agarrotado y poder coger ritmo en el 1º km de "estiramiento del pelotón".

Me pongo bajo la pancarta de salida. Son las 8:57 AM y sólo quedan 3 min. Somos unos 80 corredores para la prueba larga de 27K. Muchos de los buenos han decidido correr la corta (11K).

Salida en Fiscal (altitud 760 m)

Se da la salida y corremos los primeros 800 m por las calles de Fiscal, en terreno horizontal, para estirar el pelotón. Como he calentado, puedo salir a un ritmo algo alegre y, durante ese primer kilómetro, puedo disfrutar la sensación de ir el primero de la carrera. Serán los únicos minutos en este puesto de honor.
No tener nadie delante y escuchar decenas de pisadas detrás de ti es una sensación especial, poco frecuente, para disfrutarla, aunque fueran sólo los tres primero minutos de la carrera.


 Ahí voy, a los 700m de la salida, todavía en primera posición. Pronto me dejaría pasar por el pelotón de cabeza, para colocarme detrás de los 10 primeros
#graciasporlafotomoraga

Tras esos primeros 3 minutos (800 m), giramos a la izquierda para entrar en un prado donde empieza la pendiente. Poco a poco, voy rebajando el ritmo y se me ponen a la par los primeros. En la primera rampa ya me han pasado 3 o 4 corredores. Paso junto a la cámara de Ángel Moraga con el ganador, Iñaki Korta, pisándome los talones.



En la rampa inicial tras la pradera, a los 6 min de carrera
Pisándome los talones, el ganador, Iñaki Korta
#graciasporlafotomoraga

Me los pisaría y le dejaría marchar. En la senda ascendente, que se adentra en el bosque, intento coger mi ritmo. La senda va subiendo y alternando con tramos de pista, volviendo luego a senda de nuevo. En el km 2 de carrera la senda coge pendiente y traza unas lazadas. Sólo los más fuertes pueden seguir corriendo. Otros vamos andando, para no pasarnos de pulsaciones.
Por fin en el km 3 volvemos a entrar en pista y se puede volver a trotar un poco, durantes 500 m más. En el km 3,5 la pista se deja y se toma a la derecha una senda en franco descenso. Estamos a 1.120 m, habiendo salvado 360 m iniciales de desnivel.

Primer descenso tras 3,5 km de carrera:

Tenía memorizados 5 tiempos de paso del año pasado, para tener una referencia de cómo iba en cada sector. Las sensaciones al llegar a este punto es que iba más "asfixiado" y lento que el año anterior. Pero al llegar vi el tiempo: 29' 20". El año pasado pasaba por este punto en el min 30 y 30". Así que iba 1 min y 10" más rápido que el año anterior!
Con razón me sentía algo falto de aire. Había recortado 1 min en la primera media hora!

Eso me hizo sentirme bien. Me hizo ver que no necesitaba correr más y que, tal y como iba, lo que debía de hacer era mantener una economía de carrera que no me pasara factura en la parte final. Así que decidí bajar con prudencia.
La senda baja entre el bosque y conviene bajar la con cuidado, para no pegarte una buena leche por querer ganar segundos (además de agotar los cuádriceps a la media hora de una carrera que dura más de 3 horas...).

Tras 0.5 km de bajada, traza luego otro medio km en horizontal y luego sigue otros 600 m en descenso, muy disfrutón. Allí, en el km 5,28, gira 90º a la izda y comienza de nuevo a subir por el bosque, desde los 940 m a los 1.100m, para continuar en horizontal y morir finalmente saliendo a una pista, cerca del km 7 de la carrera.

A la derecha, Iñaki Korta, llegando el 1º a la trepada del muro donde Monrasín nos hizo estas fotos

Allí había un pequeño segundo avituallamiento. En el 1º bebí un sorbo de agua y cogí algunos trocitos de plátanos. En este 2º avituallamiento, un nuevo sorbo de agua y un par de trozos de naranjas (que no había plátanos).
Este era el 2º punto con tiempo de paso memorizado. El año anterior, en el min 56'. Este año, en el 53'50". Más de 2 min de ventaja. Bien, la cosa va bien, pensaba.




A la derecha, los corredores 2º y 3º de la prueba, Alberto Mirón y Jose Luis Calvo.
En la bajada desde la cima, Alberto tuvo que retirarse tras torcerse el tobillo


Km 7, empiezan los 2 km de pista hacia arriba
Altura 1.087 m

A partir de ahí vienen 2 km de pista, en suave inclinación ascendente, que permite trotar sin cansarse uno demasiado. Es un tramo habitualmente en sombra, en la cara oeste de Canciás, que permite mantener un ritmo constante, cómodo, trotando. No es un tramo para andar, pues la pendiente es suave. Es bueno haber entrenado correr este tipo de pendiente suave, pues se consigue avanzar manteniendo bien la respiración, sin sufrir apenas nada.

Tras esos 2 km (altura 1.315 m, km 8,9) nos desviamos a la derecha a una trocha (pista ancha) con mucha pendiente, donde hay que andar. Pero pronto, menos de 10 min después (km 9,6, altura 1.450m) volvemos a coger senda a la izquierda, muy suave, casi horizontal, pudiendo trotar un poco de nuevo. Y así, la senda, con poca pendiente y permitiendo correr, traza un largo flanqueo bajo la cara norte de la montaña, durante una distancia de 1,6 km, ideal para utilizar otros músculos diferentes de los de caminar. En estos tramos llevaba a algún corredor delante y a algún otro detrás. En los avituallamientos conseguía recortar algunos segundos, pues sólo me tomaba un sorbo rápido de agua y cogía algo de fruta (trozos de plátanos básicamente) que llevaría en las manos y que me iba racionando, tomando poco a poco conforme subía. Compartí gran parte de la ruta con Jorge Palop, un chaval casi 20 años más joven que yo y que llevaba mi ritmo. El me solía pasar entre avituallamientos (estaba más fuerte) y yo le pasaba cuando él paraba a comer en los controles. Muy majete este Jorge, la verdad.

Bueno, continuamos.
Un poco más adelante en el km 11,24 (altura 1.542 m) la senda gira a la derecha suavemente y comienza de nuevo a subir, para salvar 180 m en 800 m de distancia. En el km 12 de carrera (1 h 40 min) sales a unos prados y ya ves al fondo la muralla por la que tendremos que trepar en breve. Queda pues, sólo el último repecho para la muralla de la cadena, donde se encuentra Monrasin (Ramón Ferrer).
Tras el prado, se trota un poco por la senda unos 500 m, hasta el km 12,6 donde empiezan las rampas más duras, sólo para andar (e incluso agarrarse a algún árbol) que nos lleva a la muralla final, donde está la cadena que ayuda en los metros finales más verticales.

Paso de la cadena/Monrasin-fotos:  Km 13, altura 1.844 m

Un rato antes de llegar bajo la muralla escucho a Monrasin gritar: "Jorgeeeee". Qué alegría Monrasín!. Lo más duro está ya hecho. Sólo queda subir por la roca, que resulta hasta entretenido, para acceder a la otra parte de la montaña. Allí arriba hay otro avituallamiento, donde está mi compañera pediatra Guiomar (Pediatra Pirenaica del Alto Gállego) y donde me tomo otro sorbo de agua y agarro otros trocitos de plátano.



Trepando la muralla antes de utilizar la cadena de la izquierda
#graciasporlasfotosmonrasin


Aprovechando la cadena
#graciasporlasfotosmonrasin

Este era mi 3º tiempo memorizado. El año pasado paseé en 1 h 58 min. Este año, en 1 h 53 min! Llevaba ya 5 min de ventaja respecto al año anterior!

Desde ese punto toca bajar por terreno de erizos y tierra unos 400 m de distancia, que conviene descender con prudencia, pero sin bajar el ritmo. Se pierden unos 80 m, antes de doblar a la izquierda para remontar al Este una suave vaguada herbosa camino de la cima de Peña Canciás. Son cerca de 900 m de distancia a la cima, salvando 150 m de desnivel. Se puede trotar la primera parte de este tramo. La parte final, yendo uno ya cansado, se suele andar (seguro que los primeros la correrían también).


Cima de Peña Fiscal.  1.929m. Km 14,27 de carrera. Tiempo 2 h 06 min

El año anterior pasaba a 2 h y 11 min, de modo que mantengo los 5 min de ventaja respecto al año 2018.
Mostrando a Monrasin los plátanos del avituallamiento arriba del muro de la cadena


A partir de ahí las bandas rojas y blancas te mandan en diagonal a la derecha, durante unos 300m, antes de bajar directa la ruta hacia el sur. Viene ahí un terreno incómodo, de roca lisa, llena de bolos de piedras y de erizos. Terreno para no jugársela y para confiar en las rodillas y los cuádriceps, pues te puedes pegar una buena torta sin pisas mal. De hecho, en esa bajada se lesionó un tobillo Alberto Mirón, que iba en 2ª posición.
Es casi un km de descenso vertical en los que pierdes 200 m de desnivel.
Luego le sigue un km más suave, por senda y hierba, más seguros. Finalmente, en el km 16.3 doblas a la izquierda para iniciar la última subida del dia, tendida, que permite correr, durante  1 km, subiendo sólo unos 70 m. Discurre por senda y por hierba y permite trotarla.

A la derecha, Claudia Valero, la campeona junior de esquí de montaña, pasando como primer mujer por la muralla de Canciás, fotografiada por Ramón Ferrer



Collado final, coche Guardia Civil.  km 17.31, altura 1621 m


Y llego por fin al collado final, donde está siempre el 4x4 de la Guardia Civil y un pequeño avituallamiento. Llevo 2 h 24' 30". El año pasado, 2 h 30' 10".

Voy unos 5' 40" adelantado. Se inicia aquí el largo descenso a meta, de casi 10 km de distancia. Es un buen descenso, en el que se puede correr bien.

Me tomo un breve y último sorbo de agua y agarro otros trocitos de plátano, mientras Jorge Palop ve cómo vuelvo a pasarle en su pausa más larga para avituallarse. Rápidamente se pone a mi par y bajamos juntos por la senda vertiginosa, cubierta de hojas y con muy poca luz, oscura en un bosque tan cerrado. Invito a Jorge a pasarme, que es más joven, rápido y fuerte que yo. Pero prefiere no arriesgar, pues sus zapatillas no le ofrecen confianza frente a un posible esguince. 
Y allí bajamos, mano a mano, rápidos pero prudentes. Tras unos primeros km más verticales, donde se puede correr más, la senda va cogiendo el fondo de valle y baja más tendida.
Vamos por el km 21 y noto que las piernas empiezan a notarse cansadas, así que se impone un ritmo más económico, evitando tropiezos, lesiones e intentando evitar agotar del todo los cuádriceps.
Jorge me dice que va a intentar adelantarse, así que le dejo irse. También nos adelanta, un poco antes, Garitoiz Alberdi, que quedaría 20" delante de mí. También corriendo con las Mafate Speed 2 de Hoka One One.

Sigo, ya en solitario, avanzando prudente por la senda, ya con calor. Este tramo final es muy horizontal y hay que mantener el ritmo para no quedarse parado. El pueblo de San Juste, mi última referencia de tiempo, tiene que estar al caer, pienso. Un poco antes de llegar a San Juste me encuentro a Jorge, que se ha tenido que parar por un tirón muscular y está estirando la pierna. Le paso y le animo a seguir en cuanto se recupere.


Por las calles de Fiscal, ya cerca de la mete
#graciasporlafotomoraga

Entrando en meta en Fiscal
A la derecha, de azul, los hermanos Korta, 1º y 3º de la prueba 27K
#graciasporlafotomoraga



San Juste. Km 24,44. Altitud 800 m

Paso por San Juste con un tiempo 3 h 02' 12", justo 5 min antes que el año pasado. En la larga bajada no he perdido tiempo respecto al 2018, a pesar de flaquear un poco las piernas al final.
Sólo quedan los últimos 2,5 km, por terreno casi llano, hasta Fiscal, por senda entre campos de cultivo. El sol aprieta y el calor hace mella, algo que ya esperábamos para este tramo final de la carrera.

Este tramo final al sol, monótono y horizontal, es duro mentalmente. Me ayuda ir mirando el reloj, sabiendo que de San Juste a la meta sólo se tardan entre 12 y 13 minutos, así que voy haciendo la cuenta atrás. Mantengo un trote digno conforme veo que pasan los minutos. Ningún corredor delante; ninguno detrás.

Y entro finalmente en las calles de Fiscal. Alegro un poco la zancada porque sé que es ya cuestión de metros. Aparece la meta. Me animo un poco más y termino cruzando con un tiempo de 3 h 14' 34". El año pasado 3 h 20' 02". Casi 6 min más rápido. No está mal para ser un año más viejo. Los años pasan pero nos vamos manteniendo.

El año pasado, terminando también en el 11º puesto, conseguí un 3º puesto en veteranos. Pero este año bajaron la categoría de veteranos de los 45 a los 40 años, de modo que en los 11 primeros corredores estábamos 8 veteranos!
Muy contento, a pesar de quedar lejos del podio. Lo más importante, pasarlo bien, no lesionarse y rendir dignamente.

Quiero agradecer desde aquí a la organización de la Carrera Peña Canciás y a todos los voluntarios, por hacerlo todo tan bien. Los avituallamientos estaban por todos lados, no siendo necesario llevar nada de agua o comida en toda la carrera. La señalización, con las bandas rojas y blancas, impecable. No te podías perder. Una maravilla de marcaje.

Enhorabuena a todos!

Jorge GD

 Tras terminar la carrera pude conocer a Iñaki Korta, el vencedor de la prueba larga.
Por lo visto es seguidor del blog y quiso hacerse una foto conmigo. Qué honor!
Gracias por tu humildad Iñaki. Tu hermano (3º) y tú (1º) sois unos verdaderos campeones!


Para ver todas las clasificaciones de la carrera