Oscar Díez, camino del collado entre los Mallos de Lecherin y el Lecherín o Pico de la Garganta de Borau
Lecherín o Pico de la Garganta de Borau (2.566m)
Por Rigüelo. Valle Aísa.
Desnivel: 1.200m
Oscar Díez, Blanca de las nieves y Jorge Gª-Dihinx
28 feb 2013
Este jueves era el día de la Gota Fría, que traería cerca de un metro de nieve a las estaciones de esquí turolenses y lluvias abundantes a Levante y Cataluña.
Sabemos que cuanto más al Norte y al Oeste subamos más limpio estará el día, aunque también sabemos que durante la tarde las nubes nos invadirán de todas todas.
Sabemos que cuanto más al Norte y al Oeste subamos más limpio estará el día, aunque también sabemos que durante la tarde las nubes nos invadirán de todas todas.
Decidimos irnos al Valle de Aísa, donde la nieve corta la carretera un par de km antes de la doble curva en herradura final de entrada al valle. Sin embargo, la progresión con esquís es muy cómoda por la pista y en media hora estamos pasando cerca del Refugio de Saleras, rumbo al lomo que sirve de inicio común de las ascensiones al Aspe, Bozo, Garganta y Lecherines.
Mapa Alpina 1:25.000 con el recorrido inicialmene ideado.
Finalmente no pudimos hacer la circular por Lopez Huici y volvimos por el mismo itinerario
Imagen aérea que muestra el aspecto de nieve que tiene estos días este Valle de Aísa.
Algo inusual, con porteos habituales en un año normal en estas laderas orientadas al sol.
Subimos por el lomo central, al norte, como yendo al Aspe y, en la cota 1.650m trazamos un largo flanqueo (media ladera) a la derecha (ojo cornisas y aludes cayendo de arriba) para entrar en el Valle de Rigüelo. Lo recorremos por fondo de valle, girando luego poco a poco a la derecha para buscar las rampas finales que nos llevan al collado entre el Lecherin y los Mallos, a 2.386m.
Seguimos con esquís puestos hacia el Lecherín por su empinada ladera sur final, hasta dejarlos al pie de una roca donde se suele formar una repisa. Desde allí subiermos a pie la rampa final, ya muy empinada para hacer la con esquís.
Aunque hay 20-30 cm de nieve nueva, la nieve de debajo está dura y resbala la bota, así que decidimos poner crampones.
Abrir huella era toda una odisea, hundiendo con fuerza todo el regatón del piolet y todo el brazo contrario para usarlos como tracción en cada paso, hundiéndome hasta la rodilla varias veces. Cerca de media hora nos llevaría alcanzar la cima, cuando en condiciones normales se recorre en 10 min esta rampa sur final.
El día se ha termina de cubrir hace un rato. Tras una breve estancia en la cima bajamos bajo las nubes, destrepando de espaldas la rampa cimera- Tendrá unos 45 grados.
Nuestra idea inicial era volver en ruta circular, por la ladera Este que baja al lado de Canfranc, donde está el Refugio de López-Huici, para remontar luego el Collado de la Madalena y volver por allí.
Pero ocurrían dos problemas:
Por un lado, esa ladera Este había empezado a fundir con el sol de la mañana, pero tras nublarse, se había empezado a formar una costra de rehielo superficial (aún teníamos la iso 0º muy fría, a 900m). Esa fina costra encarrilaba los esquís y hacía más difícil el descenso. Además, la falta de visibilidad hacía peligroso cambiar de valle, sin una huella a seguir como referencia.
Por un lado, esa ladera Este había empezado a fundir con el sol de la mañana, pero tras nublarse, se había empezado a formar una costra de rehielo superficial (aún teníamos la iso 0º muy fría, a 900m). Esa fina costra encarrilaba los esquís y hacía más difícil el descenso. Además, la falta de visibilidad hacía peligroso cambiar de valle, sin una huella a seguir como referencia.
Decidimos pues volver por nuestra misma huella, que nos hará de guía si hay poco relieve esquiando al bajar. Además, al ser orientación oeste (en sombra toda la mañana), no ha transformado y la nieve sigue polvo, fresca, con 20-30cm nuevos caídos estos días anteriores.
Así que nos quedaban más de 1.000m de descenso sobre nieve polvo. De esa que es tán fácil bajar, sin apenas girar, sólo dando pequeños botes y flexionando en cada recepción. Es tan distinta la técnica de esquí en estas nieves... Los cantos ni los usamos. Basta ir saltando suavemente, con el ritmo de un metrónomo, sin parar la cadencia, girando sutilmente al rebotar las suelas del esquí en cada saltito... sin gastar apenas energía. C'est comme de la musique... decía un guía de Sas Fee, verdad Maria Victoria?
Es una sensación especial cuando uno aprende a gestionar esa nieve suelta. Antes íntentábamos girar como en nieve dura, con giros cerrados que nos impedían coger el ritmo de bajada. Ahora ya bajamos rectos, con pequeños saltos, sin apenas esfuerzo, sin perder el ritmo, sin apenas sentir nada, al no haber casi fricción. Pocas veces tenemos estas nieves en el lado sur del Pirineo... y ahora tocaba disfrutarla. Sólo nuestra huella de subida nos hacía percibir la velocidad que cogíamos, al quedar todo blanco y con pocas referencias en esa tarde gris.
Llegamos a la parte baja del Valle del Rigüelo y volvemos a trazar, rápidos, la media ladera. A la ida habíamos trazado bien esa huella a media ladera, en suave ascenso, con el fin de que nos sirviera de raíl de bajada en ese flanqueo expuesto a aludes de fondo. En el cruce rápidos, vemos cómo han caído varias coladas en nuestra ausencia. Todo está muy cargado y hay que ir siempre mirando hacia arriba, no vaya a caer algo y no lo veamos venir...
Tras el rápido flanqueo, seguimos luego esquiando por el lomo, cruzamos más tarde el río (tapado por nieve esta temporada) y remontamos con paso patinador a la entrada de la pista, que esquiaremos dejándonos caer hasta el coche.
Gran día, de nuevo con tarde gris (habrá varios así esta semana), pero con muy buenas sensaciones.
Hasta la próxima!
Jorge
Jorge
La nieve cubre casi cmpletamente la valla de acceso al Valle de Aísa
Oscar Díez, por el lomo central inicial, ruta común al Aspe, Garganta y Bozo
Panorámica de 3 fotos de la entrada del Valle de Aísa.
Collado del Bozo - Bernera - O Ibon - Bozo - Garganta - Aspe - Lecherin - Rigüelo
Oscar y Blanca con el Valle de Rigüelo a nuestra derecha y nuestro pico al fondo, bien blanco y visible
Trazando el flanqueo de entrada a Rigüelo.
El cielo al sur está precioso
El cielo al sur está precioso
Al fondo está el Pico y collado de la Madalena, por donde queríamos volver en un principio
Bajo las murallas del Pico Riguelo y de los Mallos.
A la izquierda al fondo, el paso de la Garganta de Aísa, cruce a a la zona de Candanchú
Las nubes empiezan a cubrir todo. Al fondo, nuestro collado y nuestro pico
Blanca, con los Mallos de Lecherin detrás
Blanca y Oscar, en las rampas inciales a la cima del Lecherín.
Detrás se ven nuestras huellas de esquí
A mitad de ascenso a la cima
Blanca y Oscar, llegando a la cima
Oscar nos sacó esta foto en la cima. Muchas gracias!
Blanca, iniciando el descenso
Volvemos a por los esquís
Nieve polvo para el descenso
Blanca
A mitad de descenso, Blanca y Oscar
Bonitos cielos al sur
Practicamos el esquí sobre nieve polvo, no tan habitual otras temporadas
Blanca, en un descanso durante la bajada
Volviendo por la pista al coche.
Y esto ha sido nuestro Lecherin.
Hasta la próxima!
Y esto ha sido nuestro Lecherin.
Hasta la próxima!
El resto de las fotos, pinchando aquí
Hola Jorge!
ResponderEliminarSoy uno de esos que ni controla los esquís, ni suele utilizar las raquetas... O sea que, aguí estamos, mirando de reojo desde Gipuzkoa a ver cuando estará la nieve como para andar medianamente bién, sin meternos hasta el fondo. ¿como lo ves en estos momentos?
Gracias por todo lo que nos aportas!
un saludo
Xabi
Aupa Xabi!
ResponderEliminarPues de momento ya ves que hay mucha nieve y, con el probre rehielo de estos días cálidos, os hundiréis mucho en casi todos lados, pues la nieve empieza de muy abajo.
Si se confirma la entrada da aire polar del martes 12 al viernes 15, sí que tendríais nieve dura para ir con crampones sin hundiros, por las mañanas.
Un saludo,
Jorge
muchas gracias!
ResponderEliminarxabi
Buena elección no bajar por la pala al refugio Lopez-Huici. Además de avalanchosa (eso ya lo controlas tú), hay que conocerla muy bien, pues está llena de simas (grandes, no pequeñas) y hay que hacer primero una gran diagonal en suave descenso a la derecha para evitar el lapiaz.
ResponderEliminarUn espeleo ;-)